Ley de Gustafson
La ley de Gustafson (1988) viene a compensar el pesimismo
dejado por la ley de Amdahl. Ésta se refería a problemas con volumen de cálculo
fijo en que se aumenta el número de procesadores.
Sin embargo, en la práctica,
el volumen del problema no es independiente del número de procesadores, ya que
con mayor número de procesadores se pueden abordar problemas de mayores
dimensiones. Por ello, la ley de Gustafson se refiere al crecimiento del volumen
de cálculo necesario para resolver un problema. Como veremos a continuación, en
la mayoría de los casos, cuando el volumen del problema crece, lo hace sólo en
su parte paralela, no en su parte secuencial. Ello hace que el cuello de
botella secuencial tienda a cero cuando el volumen del problema aumenta.
La razón de que cierto tipo de problemas
adquieran gran volumen de cálculo es la disminución del tamaño de la malla de
cálculo o también el aumento la extensión espacio-temporal del problema. Esto
hace que el número de puntos aumente de forma cúbica respecto al grado de
disminución en la malla, si el problema es tridimensional. Hay muchos problemas
en que, además de las tres dimensiones del espacio, también interviene el
tiempo, por lo que el aumento
del volumen de cálculo es todavía mayor.
Evidentemente, esto afecta, en general, a la parte paralelizable
del problema y no a su parte secuencial, o al menos no en la misma medida. Si
suponemos
que el número de procesadores crece indefinidamente de la misma forma
que las dimensiones
del problema tendremos que
Siendo s y p,
respectivamente, las partes secuencial y paralela del problema antes de ser
aumentado en relación al número de procesadores
(por ejemplo, incrementando el número de puntos de la malla). Con estas
premisas, podremos calcular ahora la ganancia de velocidad para esta nueva situación
(la parte paralela del problema ha crecido en la misma proporción que el número
de procesadores). Para calcular la ganancia de velocidad supondremos que el
tiempo que se tardaría en ejecutar el programa (ya incrementado) en un
monoprocesador es:
y en un
sistema paralelo sería:
Por
tanto, la ganancia en velocidad vendrá dada por:
que,
teniendo en cuenta la definición de la fracción no paralelizable dada por 1.8,
se podrá escribir como
En la
figura 1.3 puede verse la representación de la ecuación 1.14 para sistemas con
diferente número de procesadores. Podría pensarse que hay una aparente
contradicción entre las leyes de Amdahl y Gustafson. Esto no es así debido a
que las premisas de ambas leyes son distintas: la ley de Amdahl se refiere a
procesos con un volumen de cálculo fijo mientras que la ley de Gustafson se
refiere a problemas cuyo volumen de cálculo puede aumentar según el número de
procesadores (esto se suele denominar escalado del problema). Afortunadamente,
esta última situación es más cercana a la realidad.
Fuente: http://www.infor.uva.es/~bastida/Arquitecturas%20Avanzadas/General.pdf





No hay comentarios.:
Publicar un comentario